El Blog de Cloe Serbal (Abogada para todo)

EL CLUB DE LA LIGA JUSTICIERA
No sabíamos que eramos felices con las pequeñas cosas hasta que una pandemia nos las quitó. La costumbre de las comidas de los viernes quedó en alto, como muchas otras cosas. Tuvimos que aprender a vivir de otra manera para que ese nuevo virus no dañara ni nuestras vidas ni las de nuestros seres queridos. Cuando nos volvimos a reunir, más de un año después, todo fue muy emotivo. Con nuestras mascarillas y medidas de seguridad, pero juntas otra vez.
Cloe, Valeria, Lucrecia ,Adara, Sharon ,Carolina y Minerva volvían a la carga.
Eran tantas las cosas que nos queríamos decir que nuestras conversaciones se entremezclaban. Cloe había escrito un libro; Valeria decidió darle otro rumbo a su trabajo; Carolina había empezado un nuevo negocio; Sharon hacía sesiones de modelaje; Adara era comisaria de rallyes; Lucrecia había creado una ONG de ayuda para animales callejeros y Minerva tenía su propio canal de videos en internet. La vida nos había cambiado tanto en un solo año pero a pesar de ello volvimos a sentir la camaradería y el poder hablar por un rato con total libertad, con nuestra frase-mantra: “Lo que se dice en Las Vegas se queda en Las Vegas”. Estábamos muy contentas por las novedades de las demás y quisimos ponernos al día de todo lo bueno que le había sucedido a las amigas, al Club de la Liga justiciera, como nos hacíamos llamar.
Cuando salió a relucir el libro de las anécdotas de Cloe, todas empezaron a contar algunas que les habían pasado a ellas.
Sharon, contó cuando en su primer día de trabajo los compañeros le cambiaron de orden la mariposa de la máquina de escribir eléctrica que usaban entonces y al trascribir la declaración del detenido ella solo veía lo que escribía en la pantallita pero al imprimirla y pasársela al Juez este le dijo entre serio e irónico:
– ¿ Esto es lo que Ud. ha entendido de la declaración?
Y al devolverle las hojas pudo ver que ponía:
!”·$%&/(()=?¿¿¿¿%$·”!”””””””””””””””””””””””$$$$$$$&/&%=====)rhruytiykglog89flfllldnnnnujjwgrl´pd`´dmm y así a lo largo de dos folios :). !Novatada de principiante!
Adara recordó cuando en una guardia le tocó asistir a una rueda de reconocimiento en el Juzgado. Al abrir las cortinas se podía ver al detenido y a otras personas más o menos parecidas. Como faltaba gente para hacerla, se puso uno de los funcionarios del propio Juzgado entre ellos. Y va el denunciante y reconoce al funcionario como “ el chorizo que le quitó la cartera”. El Juez le preguntó si estaba seguro y este contesta: “Si, segurísimo, es el chorizo”. Firmada el acta y preguntando el denunciante que donde podían hacerle un justificante para el trabajo. ¿ A qué no sabéis quien le hizo el justificante? “El chorizo”. Su cara era un tomate. Igual la camiseta de heavy metal, el pelo largo y la barba de tres días influyó…
Las demás se fueron animando con los chascarrillos y Lucrecia comentó cuando en una declaración en Comisaría su cliente, detenido por uso de vehículo de motor, a preguntas de por qué llevaba encima un destornillador de grandes dimensiones, dijo que era » pa´ limpiarse las uñas», que se le metía mucha grasa de recoger chatarra y era lo que mejor se la sacaba.
Pues yo tuve un cliente, dijo Valeria, que con gran orgullo le explicó al Juez cómo rasgaba bolsos en el autobús con una cuchilla de afeitar pegada con papel de celo en dos dedos.
Es que anécdotas tenemos para todos los gustos, dijo Carolina. El día a día da para mucho en el mundo del Derecho y si no que se lo digan al que subió de calabozos escoltado por la policía y que camino del Juzgado de Guardia iba cantando:
– ! Libre, yo soy libre! de Nino Bravo a grito pelado.
Todas acabaron riéndose.
En ese momento Minerva dijo que nos reservaba una noticia muy especial y que había querido decírnosla en persona:
!! Se casaba !!
Esa si que era una buenísima noticia. Levantamos las copas y brindamos por ella, por la amistad y por todas las cosas buenas que nos esperaban.
El Club de la Liga justiciera se reunía de nuevo.